viernes, 13 de diciembre de 2019

Capítulo 1b: Comienza la trama

Martes, 7 de Febrero, 08:00 h.

    ¿Quién podría abrir las esferas de los recuerdos sin olvidar las formas? ¿Quién debería esconder las locas razones en el corazón de la locura? ¿Quién, al fín, sería capaz de “reformar” los olvidos sin esos recuerdos tan salvajemente arrancados? Aninon no parece pretender hacerlo, pero... ¿por qué? Ella estuvo muy cerca del camino. Me ayudó a bordear el río, a volver a esa madera olvidada, a soñar sin dormir, a dormir sin soñar, a no pensar en los últimos días del viaje: ciego, intensamente ciego. Aninon es mi último recurso, mi última oportunidad para vencer. Aninon!, necesito ayuda para volver a volver.
   
    Aquella noche conseguí cerrar los ojos un par de horas, insuficiente, pero al menos el punto de desconexión me hizo sentir menos confuso. La Novela de Aninon me pareció un poco más accesible.

    Tres gemelas muertas, sobre la nieve, junto al río. Ojos azules, verdes y negros. Las tres brutalmente asesinadas. Ninguna huella. Los tres relojes parados a diferentes horas: las 7:07, las 7:17 y las 7:27. Curioso, extraño, muy extraño. El sargento Conacre me había llamado para mostrarme el escenario.

    Hombre “señor” Glopo, mi detective favorito. ¿Cómo va todo? muy pocas veces me llamaba “señor”. Necesitaba de mi ayuda

    No muy bien amigo. Tengo problemas de sueño.

    Bueno, eso nos pasa a todos.

    Ya, claro. Bien, ¿qué rollo tenemos aquí?

    Ya lo ves. Tres niñas de unos nueve años. Las tres tienen perforada la sien derecha con algo que podría ser un punzón o un destornillador. El forense dice que probablemente llevan muertas unas once horas. No hay huellas de pisadas, sólo las nuestras. Nada de sangre, ninguna marca, ... nada.

    Pero eso es imposible. ¿Cómo llegaron aquí? ¿Volando?

    Puede ser que el autor o los autores cubrieran sus huellas con nieve Conacre se encogió de hombros

    ¿Hasta la carretera?  la carretera comarcal estaba a unos doscientos metros

    Sí, hasta la carretera. Nada de nada. Ya te digo, ni una puta huella.

    ¿Y lo de los relojes?

    Sí, muy extraño. Tres horas diferentes y ...

    ¿Sabes quiénes son?

    Desde luego no son del pueblo Trivía ni de la comarca. Hasta el momento nadie ha denunciado su desaparición. Mis chicos” los dos agentes a su cargo en el cuartel ya han llamado a alcaldes, colegios y hospitales. Nadie sabe nada.

    ¿No llevaban nada encima?

    Nada, la ropa, las botas y los relojes.

    ¿Por qué dices que son gemelas?

    Es lo que opina el forense... ¿No lo ves? señaló con el dedoSon idénticas salvo en el color de los ojos. Mismos vestidos, mismas botas, mismos relojes, mismo peinado y, fíjate qué curioso, a las tres les falta el dedo meñique.

    No parecen amputados.

    Diego el forense dice que probablemente sea un defecto o un problema de nacimiento.

    Yo no sé nada de genética, pero tres gemelas con tres colores de ojos diferentes? Por cierto, yo creía que gemelos eran dos como máximo, no tres.

    No sé, a ver qué dicen en el Anatómico. se refería al Instituto Anatómico Forense de AlbopPronto llegará la “furgona” para llevarse los cuerpos. Glopo, esto es muy extraño, ¿no crees?

    ¿Quién descubrió los cadáveres?

    Andreu, un vecino del pueblo que estaba cazando. Los vió desde allí arriba señaló la otra parte del río y llamó por el móvil al cuartel.

    ¿No vió a nadie más por la zona?

    No. Bueno, dice que vió un helicóptero pasar dos veces por encima de la montaña.

    ¿De los de rescate?

    —De Andorra o tal vez de Francia, estamos a pocos kilómetros de las fronteras.

    Joder Conacre, menudo “rollo” no?

    Ya estarán con las dactilares y el adn, a ver si averigüamos algo.
perdón.

LAS TRES NIÑAS MUERTAS
Capítulo 1b
LOS HECHOS
Pendiente liberar resto del capítulo
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miércoles, 13 de noviembre de 2019

Capítulo 1a: Los hechos


 Martes, 7 de Febrero, 06:00 h.
   
    Me sentía realmente enfadado. No conseguía recordar nada de lo que Aninon me había estado explicando por la tarde. Ni siquiera estaba seguro de haber hablado con ella. Bien, tenía el principio de su novela, pero... ¿Y si la llamo ahora?...No. No contestaría.

    ¿Por qué siempre me meto en estos líos?

    Aninon es buena chica, pero últimamente me preocupa.

    No está bien. No está como debería estar. O...,¿tal vez soy yo?

    Voy a llamarla.

    Marqué el número temiendo una respuesta “nivel seco Aninon”.

    Mmmm... siii...

    Aninon, soy yo, Glopo.

    Joder! Son las cinco tío! nivel seco Aninon

    Lo siento pero... es que no puedo dormir. No me acuerdo de nada y tengo tu novela.

    Mi novela?

    Sí, la que me dejaste ayer por la tarde.

    ¿Ayer por la tarde?

    Eh!, qué pasa. No me tomes el pelo.

    Oye Glopo, son las cinco y paso de comeduras de coco a estas horas. Tómate algo y déjame dormir.

    Aninon, ¿estás consciente?

    Mañana hablamos. Taluego.

    Aninooooonnnn!

    Me colgó. Claro. Lo sabía. Esta chica no está bien.

    Aninon era mi mejor amiga. Tenía treinta y cinco años, de estatura media, delgada, cabello rapado casi “al cero” y facciones dulces y suaves; parecía una adolescente, a pesar de que no se cuidaba especialmente. Reputada psicóloga clínica, nos conocimos en nuestra época de estudiantes en Barcelona, donde yo estudiaba criminología y donde compartíamos piso, ideas y sentimientos, aunque habíamos mantenido ningún tipo de relación sexual o sentimental más allá de una pura y auténtica amistad. Era la típica “rebelde con causa”: anarquista radical, antisistema y muy inteligente. Observadora, ácida, mordaz y absolutamente independiente. No aceptaba consejos de nadie aunque ella siempre estaba dispuesta a darlos. Actualmente se dedicaba a “bloguear”, “twittear”, “facebookear” e “instagramar”. También escribía artículos en prestigiosas publicaciones de psicología al tiempo que impartía alguna que otra conferencia en universidades y centros culturales. De una cultura general verdaderamente impresionante, se podía hablar con ella de cualquier tema sin temor a que no supiera estar a la altura. Se consideraba mi ayudante personal en mi trabajo de detective y, de hecho, sus dotes de análisis, su intuición, su clarividencia y su profundo conocimiento de la psiquis humana la convertía en la perfecta “colega” de investigación. No sé qué haría sin ella.

    Realmente me sentía apartado de cualquier opción. Regresar había sido todo lo que esperaba, sin duda. Aquellos enlaces inconscientes necesitaban el calor y el color del pasado y la frieza de un futuro tan incierto como temible. La soledad no resiste los cambios, los rompe brutalmente, sin perdón.

LAS TRES NIÑAS MUERTAS
Capítulo 1a
LOS HECHOS
Parte Completa
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Prólogo: Aninon y sus pensamientos







Las tres niñas muertas


LA NOVELA DE ANINON

¿Por qué la luna y la distancia huelen a vida?"


"Nací cerca de un río. Lejos. Casi más allá de mis recuerdos. Por eso, tal vez ahora, nada puede romper mis sueños.

            Me han perseguido tanto, tan cerca... Siempre buscando la primera razón del viaje.

Aquella casa, vieja madera y escaleras rotas, comenzó a hacerme daño muy pronto. No podía entender que la noche y mis miedos pudieran encerrarme de tal manera. Y pensar... ¿Qué razones podrían controlar mis lamentos? Nadie ni nada parecía soportar esos terribles golpes de tristeza que devoraban todos mis pensamientos. Cualquier pensamiento. Todos ellos.

           Como salvajes vórtices de negro, en tropel, los fantasmas de mi sangre rasgaban el suave y tenue velo de mi primer sueño. Jamás pensé en volver a vivir aquellas noches blancas. Jamás busqué su camino. Jamás pensaría, buscaría y caminaría junto a las ácidas notas de luz que, al fín, deberían cambiar la marca del origen. Tal vez fuera el final de un nuevo comienzo. La madera: crujir. La noche: dormir. Y buscar, buscar y llegar, llegar a buscar el principio de ese nuevo final que me absorbía profundamente sin dar tiempo a devolverme mi viejo sueño.

            No era odio, ni realmente miedo a odiar. Esos recuerdos sabían de mí, de mis sueños, de mi tiempo. Y volvían a soñarme sin recordar la infinita angustia de mis miedos.

La casa, toda ella, me abrazaba con la fuerza de mil deseos. Yo siempre escondí los días de dolor. Siempre cerré la puerta del cielo.

           Y, ahora, vuelven todos, muy rápido, muy cerca.¿Debería detenerlos? ¿Podría realmente detenerlos?

Caminar como un extraño me licuó el énfasis. Volvía y volvía y volví a volver. Nunca pretendí cambiar el inicio. Tal vez sólo volver a soñarlo. Y seguir soñando el principio del camino final. Ni tan siquiera los colores de lo nuevo me podían apartar de los fríos bordes de la mezcla.

           Ahora nada juega con aquellos días. Ahora son noches desangeladas y plenas de desgarradores recuerdos vacíos de llanto.”


LAS TRES NIÑAS MUERTAS
Prólogo
La novela de Aninon
Parte Completa
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